La financiación alternativa, asignatura pendiente de España
Es ya una realidad que la banca se muestra receptiva a la hora de conceder créditos. Sin embargo, esta mejoría no puede ocultar la realidad que aún estamos viviendo.
Como ejemplo más reciente, está la inestabilidad que está trasladando Grecia a la zona euro. Las autoridades son conscientes de esta situación y así lo demuestran en el artículo 27 del Memorándum de Entendimiento que apoyaban la búsqueda de vías alternativas de captación de recursos. «A la luz de la considerable dependencia de la economía española de la intermediación bancaria, las autoridades españolas preparan propuestas para fomentar la intermediación financiera no bancaria, incluida la financiación del mercado de capitales y el capital riesgo», recogía dicho punto del Memorándum.
Todavía empresas y particulares no terminan de diversificar sus fuentes de financiación. Bravo Capital, achaca este hecho «a la falta de comprensión de que la importancia de la función financiera debe centrarse en garantizar el acceso a más fondos de una empresa de forma que ésta pueda desarrollar su plan de negocio independientemente de la situación de los mercados, de la economía o del estado puntual de una compañía».
Sobre este tema también hace hincapié el FMI. Aunque se han dado «pasos de gigante» nuestra economía, todavía se detectan algunos puntos débiles, que sería necesario corregir, el escaso desarrollo de la financiación extrabancaria.
La institución alerta que el entorno operativo presenta múltiples retos. En este contexto, las autoridades deberían continuar promoviendo que los bancos aumenten su capital y reducir altos costos asociados a préstamos fallidos. El cambio de escenario es posible, lo que podría de nuevo, comprometer el crecimiento empresarial.
Bravo Capital se constituye como alternativa de financiación al sistema bancario que tantos organismos internacionales reclaman.
Medio que recoge la información:
La Razón